Psicoterapia con Perspectiva de Género

Quizás te preguntes ¿qué es la psicoterapia con perspectiva de género?

Te respondo:

Se trata de poner bajo el microscopio el impacto de la variable género sobre la persona que acude a terapia.

Se analizan los roles, los estereotipos, la identidad, los comportamientos, las elecciones,  las vivencias, las experiencias, las relaciones de poder, la gestión de las emociones, la construcción de la personalidad, así como los mandatos socioculturales transmitidos generacionalmente.

¿Por qué es útil la perspectiva de género en el ámbito de la salud mental?

Puedo asegurarte que no sólo es útil, sino que es fundamental.

Es más, personalmente, lo considero un acto de responsabilidad individual y profesional tener unos cimientos sólidos sobre esta variable.

Tú, yo, TODAS/OS, estamos inmersas/os en un contexto, sin embargo, no a todas nos atraviesa de la misma forma ¿verdad?

La psicoterapia con perspectiva de género tiene una gran ventaja: incorporar en consulta el contexto en el que se mueve la persona.

Esto es IMPRESCINDIBLE para una buena intervención terapéutica porque permite ajustar al máximo el tratamiento en función de cómo la realidad impacta en la salud mental de cada persona en particular.

Esto nos permite alejarnos de un concepto individualista y simplista del problema, manteniendo una mirada amplia y al mismo tiempo minuciosa y profunda el mismo.

¿Por qué elegir psicoterapia con perspectiva de género?

Porque la psicoterapia con perspectiva de género permite:

  • Atender, comprender y responder de forma diferente a las expectativas relacionadas con los mandatos de género
  • Aprender a aceptar la identidad, orientación sexual-afectiva y la expresión de género en toda su diversidad
  • Trabajar con las inseguridades y la baja autoestima asociadas a la identidad o expresión de género
  • Tener en cuenta la diversidad y las experiencias de discriminación asociadas a dicha diversidad
  • Aprender a construir relaciones equitativas donde predomine la igualdad y el respeto incondicional (trabajar sobre los celos, la ruptura, la infidelidad, la dependencia emocional, la conciliación familiar, la comunicación de pareja, etc.)
  • Instalar una mirada de respeto incondicional hacia el propio cuerpo. Hacer las paces con la mirada en el espejo.
  • Incorporar herramientas concretas que le permiten a la persona alcanzar un nivel de autoconocimiento profundo y respetuoso consigo misma/o y saludable.

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